Los jugadores de Osasuna corren para celebrar el gol de Pablo Ibáñez en la prórroga. Fotografía propiedad del Twitter oficial de CA Osasuna.
Osasuna resiste el asedio de San Mamés y se clasifica para la final de copa con un gol del canterano rojillo en la prórroga
La Semana Santa es una época de devotos. En Pamplona, el santo predilecto y al que se encomiendan es San Fermín. En CA Osasuna eran conocedores de que conquistar San Mamés, ‘la Catedral del fútbol’, es una ardua tarea, y más en una eliminatoria de Copa del Rey. Los rojillos sabían que iban a sufrir, pero con un buen trabajo colectivo y una pizca de fortuna (ayuda divina para los creyentes), podrían alcanzar la segunda final de copa en su historia.
Dos equipos muy físicos y con poco gol
Tras un partido muy competido en El Sadar, Osasuna obtuvo una mínima ventaja gracias al golazo de Abde, que precisamente era el último gol que había anotado el club pamplonica, llegando a San Mamés tras cuatro partidos sin marcar. El Athletic también llegaba sumido en una crisis goleadora. De los últimos cuatro enfrentamientos ligueros, solo habían sido capaces de perforar la portería del Valladolid.
Tanto Ernesto Valverde como Jagoba Arrasate llegaban con sus onces de lujo. Solo causaban baja Ander Herrera, Lekue y Morcillo en el Athletic Club, mientras que CA Osasuna llegaba con toda la plantilla disponible.
San Mamés, un infierno para los visitantes
La afición del Athletic Club es una de las mejores del mundo, y lo demostraron tanto en la previa como durante el partido. El recibimiento a su equipo fue tan espectacular y multitudinario que Osasuna llegó con media hora de retraso al estadio, teniendo que atrasar el comienzo del partido diez minutos. Durante los 120 minutos que duró el partido de vuelta, los aficionados rojiblancos convirtieron el nuevo San Mamés en una olla a presión.
Los leones salieron al campo con un once muy ofensivo en búsqueda de la remontada, por lo que Osasuna optó por defender con orden y salir rápidamente a la contra. La primera del partido la tuvo Guruzeta. El delantero del Athletic se llevó el balón a trompicones entre los dos centrales rojillos, pero Sergio Herrera se hizo enorme y evitó el gol del ex del Amorebieta.
Asedio con premio
Los locales asediaron la portería osasunista, pero la figura de Aridane emergió para desactivar el ataque del Athletic. Recién superada la media hora de juego, un centro de Guruzeta encontró la entrada sin oposición de Óscar de Marcos. El cabezazo del lateral se encontró con la excepcional respuesta de Sergio Herrera. El portero mirandés salvó por segunda ocasión a su equipo, pero no puedo hacer nada en el posterior saque de esquina. Mikel Vesga prolongó el centro de Muniain e Iñaki Williams desvió el balón en el área pequeña, entrando el balón tras pegar en el larguero y equilibrando la eliminatoria en el minuto 33 (sí, en el 33).
A pesar del dominio local, los jugadores de Osasuna se asomaban con peligro al ataque, pero sin poner en apuros a Aguirrezabala. En los minutos previos al descanso, Iñaki Williams remató un centro de su hermano Nico, pero el gol quedó anulado por fuera de juego del delantero ghanés.
Nico Williams tuvo la clasificación en sus botas
En la segunda mitad se mantuvo el guion de la primera. Era muy difícil pensar que Osasuna sería capaz de aguantar el acoso de los leones, pero la falta de puntería fue clave. Tras una serie de centros y cabezazos inofensivos, Nico Williams tuvo la ocasión mas clara del encuentro. En un contragolpe a toda velocidad, Iñaki encontró al menor de los Williams. El internacional español se quedó solo ante Sergio Herrera, pero su disparo se marchó por encima de larguero.
En otro centro lateral, Íñigo Martínez se topó con la rápida reacción del guardameta y, en el minuto 86, una volea de Raúl García se volvió a topar con las manos del portero de Osasuna. Nico Williams cazó el rechace, pero de nuevo su disparo se marchó muy desviado, por encima de la portería.
El resurgir de Osasuna en la prórroga
Ya en la prórroga, Sergio Herrera salvó por enésima ocasión a Osasuna tras desviar a córner un cabezazo de Vesga. A pesar de que el Athletic había sido superior durante el tiempo regular, la entrada de Kike Barja revolucionó el ataque visitante.
Los rojillos tuvieron hasta tres acercamiento peligrosos, pero fue en el minuto 116 cuando apareció el santo. El ‘Chimy’ Ávila perdió la disputa con Vivian, pero el esférico fue recogido por Moncayola. En centrocampista de Osasuna levantó la cabeza desde el lateral del área y centró el balón a la frontal de la misma, donde entraba Pablo Ibáñez. De canterano a canterano, de Moncayola a Pablo Ibáñez. Este último acomodó el cuerpo para golpear con sutileza y elegancia el balón, de primeras y con el interior del pie. La estirada de Aguirrezabala fue en vano y el disparó entró rozando el palo.
Celebración hasta altas horas de la madrugada
Todo el banquillo rojillo saltó al campo de la euforia, podían volver a una final 18 años después. Un Athletic muy mermado tanto física como mentalmente lo intentó a la desesperada, pero el bloque defensivo de Osasuna era impenetrable.
Una vez finalizado el partido, tuvieron lugar dos hechos extrafutbolísticos muy dispares. Una fue muy bonita: la Plaza del Castillo llena hasta la bandera en Pamplona para recibir al equipo a las tres de la madrugada. Por otra parte, una minoría de aficionados del Athletic criticaron duramente a Nico Williams por las dos claras ocasiones que desperdició, utilizando lamentables insultos racistas en la mayoría de veces, teniendo que borrarse las redes sociales el joven jugador.
El Athletic Club se queda una vez más a las puertas de conseguir un título, por lo que el objetivo de clasificar a competiciones europeas ahora pasa por asegurar la séptima plaza en liga y que el vencedor de la Copa del Rey sea Real Madrid o Barcelona.
Un Club Atlético Osasuna de récord
CA Osasuna se convierte en el primer equipo en la historia de España en ganar cuatro prórrogas en la misma edición de un torneo. Tras las dos cómodas victorias frente a CD Fuentes y Arnedo, el equipo pamplonés necesitó una prórroga para vencer al Gimnàstic de Tarragona. En octavos, un gol de David García en el descuento forzó los treinta minutos adicionales, venciendo al Real Betis en los penaltis. Ya en cuartos de final, fue el Sevilla el rival de los de Jagoba Arrasate. En-Nesyri forzó la prórroga, pero El Sadar hizo su magia para clasificar a Osasuna a las semifinales.
Desde el cambio de formato de la competición, CA Osasuna es el sexto finalista diferente de ocho (Valencia, Barcelona, Real Sociedad, Athletic Club (x2), Betis y Osasuna). Además, el club rojillo se clasifica por vez primera para disputar la Supercopa de España.
En búsqueda de un rival para la final
Esta misma noche a las 21:00 horas se definirá el rival de Osasuna. En el Spotify Camp Nou se disputará un clásico por todo lo alto tras la victoria por la mínima del Barça en la ida. Veremos si los culés repiten como finalistas o el Real Madrid se suma a la lista de finalistas con el nuevo formato.
Repito mi pregunta por tercera vez: ¿Podrá CA Osasuna ganar la Copa del Rey por primera vez en su historia el próximo 6 de mayo en La Cartuja?